lunes, 29 de febrero de 2016

Capítulo 7 de "Return"

¡¡Muy buenas a todos!! La larga espera ha tenido su recompensa, hoy hay capítulo nuevo, por lo que... AQUÍ LO TENÉIS.

CAPÍTULO 7

Habían pasado 2 meses desde aquella terrible pelea. Fernando ya se había recuperado de los golpes y heridas. Lo único que seguía herido era su sentimiento hacia Claire. Le gustaba mucho, pero ella seguía con Roger.


Esa mañana habían quedado Claire y Fernando para ir a la casa de campo de los padres de él. Quedaban todas las semanas y se había forjado una bonita amistad entre ambos.
-          Estoy listo, ¿nos vamos Claire?
-          Cuando quieras.


Cogieron un taxi y se fueron a la casa de campo de Fernando.
-          La hemos comprado hace poco, así que todavía tenemos que terminar de decorarla y tal. Faltan muchas cosas.
-          Bueno da igual. Está genial por fuera.
-          Me alegra que te guste. Entremos.


Fernando abrió la puerta e invitó a entrar a Claire a sentarse mientras él preparaba unas bebidas.
-          ¿Te apetece algo en especial Claire?
-          No. Coge lo primero que pilles.


Cuando Fernando terminó de preparar los cócteles, llamó a Claire, brindaron y comenzaron a beber tranquilamente mientras charlaban.


Un rato después, salieron a la parte trasera de la casa. Fernando quería que Claire admirase la gran vista que tenían desde allí.
-          ¿Te gusta?
-          Fernando, es impresionante. Nunca había visto nada igual. Muchas gracias.
-          No hay de qué.


En ese momento, a Fernando se le ocurrió una idea loca.
-          ¿Te apetece que nos bañemos?
-          ¿Dónde? ¿Aquí?
-          Claro, es un laguito, estamos solos.
-          Pero… no tengo biquini.
-          Hay ropa de mi hermana dentro, si quieres vamos a mirar por si hay algo que te quede.


Finalmente, se metieron en el lago y se pusieron a bañarse, a jugar y a nadar juntos.


Después de estar un rato así, salieron del agua y Fernando, sintiendo muchas mariposas en el estómago, cogió de las manos a Claire.
-          Claire, está siendo un día genial contigo a mi lado. Eres muy importante para mí, que lo sepas.
-          Tú también eres muy importante para mí. Eres muy especial y te quiero mucho.
-          Yo también te quiero… ¿Tú me quieres igual que yo a ti?


Claire se sentía culpable. Estaba comenzando a sentir algo por Fernando. Era muy dulce y cariñoso con ella, pero tenía a Roger y por muy malo que fuera, no podía engañarle.
-          Fernando, esto no está bien. Tengo novio y tú deberías comprenderlo.
-          Lo sé Claire, pero mis sentimientos hacia ti son muy fuertes y no puedo evitarlo. Perdóname.


A todo esto, el Fernando más mayor, tras la pelea de la plaza fue a una tienda a comprarse ropa y luego a casa de Patrick a ducharse y acicalarse un poco. Tras esto, cogió de nuevo la máquina del tiempo y viajó hasta el día en el que Roger se presentaría en la empresa para que lo contrataran.


Aquella vez, Fernando tuvo muchas complicaciones a la hora de salir de la máquina y cada vez más. Sabía que estaba abusando de la máquina y cambiando mucho la línea temporal pero debía hacer un último esfuerzo para volver a tener todo tal y como estaba.


Ahora era el momento de llevar a cabo el plan que tenía pensado para hacer que Roger y Claire terminaran y, para ello, necesitaría la ayuda de una “vieja amiga”.


Lulú Pretel. La misma en vivo y en directo. Fernando sabía que, al no casarse con su padre seguiría siendo actriz porno, por lo que el sitio donde la encontraría casi con toda seguridad era en los estudios de cine.


Efectivamente, Fernando llegó allí y al verla, se quedó quieto, ya que ella se acercó hacia él.
-          Perdona, ¿tú eres el director de la escena con el que había quedado?
-          Eh… Sí, soy yo.
-          Menos mal, ya era hora de que aparecieras. Bueno, ¿con quién rodo esta vez?


Fernando se sorprendió mucho al verla y que ella no supiera quién era. Después de todo lo que le había hecho sufrir y ahora él era un completo desconocido…


Cuando Fernando volvió en sí, contestó a Lulú.
-          Hoy vamos a hacer algo especial, para innovar un poco.
-          Eso no me lo habías dicho. ¿Qué se supone que tengo que hacer?
-          ¿Te gustaría hacer una escena con un chico de la calle? Uno que no sea actor.


Lulú levantó la ceja sorprendida de lo que ese “director” le estaba pidiendo.
-          No pongas esa cara Lulú. A ver, la escena sería coger la cámara, escoger a un chico, comenzar a besaros y luego ir al estudio y seguir con la escena.
-          Pero el chico me tiene que gustar a mí. No vale que escojas a uno mierdoso de estos que no valen para nada. Si tengo que follar con un desconocido al menos que me guste a mí.


Fernando asintió con la cabeza y aceptó las condiciones de ella.
-          ¡Ah! Y una cosa más. Nada de sexo anal. Vaginal y oral lo que sea pero anal no. Son mis
condiciones.
-          Está bien, no te preocupes que se hará todo conforme pidas.


Lo que quería Fernando es conseguir liar a Lulú con Roger y hacer que Claire de alguna forma los pillara para dar rienda suelta al amor de Fernando y Claire.
-          Y una pregunta.
-          Dime.
-          ¿Tengo que desnudarme y enseñar cacho aquí en la calle o eso ya lo hacemos en el estudio?


Fernando ya la tenía en el bote. Ahora quedaba la peor parte. Conseguir a Roger y que no sospechara nada…
-          Todo en el estudio. Si tú crees que enseñando algo a la cámara va a hacer que la escena quede mejor es decisión tuya.
-          Está bien.
-          Voy a llamar al cámara, estará a punto de llegar. No sé por qué tarda tanto.


Unos cinco minutos después llegó el “cámara” encargado de rodar la escena.


Al llegar, Fernando sonrió un poco al ver las pintas de Samuel.
-          Al fin llegas. Ya era hora… Roberto. Lulú, este será el cámara que grabará tu escena.
-          Ah hola. Encantada de conocerte.
-          Director, ¿puedo hablar contigo un momento?


Samuel se llevó aparte a Fernando.
-          ¿Se puede saber de qué va esto? Estaba trabajando tan ricamente cuando mi padre me llama exaltado diciéndome que me tengo que venir al estudio arreglado y que él va a suplirme en el laboratorio. ¿De qué va todo esto?
-          ¿Te acuerdas del plan que tenía?
-          Sí.
-          Esto es parte del plan.
-          ¿Y me lo podrías contar? ¿Qué tengo que hacer?
-          Vas a hacer de cámara de una supuesta escena porno.
-          ¡¿CÓMO?!


Fernando calló a Samuel.
-          Shhh tranquilo hombre. Está todo controlado. No vas a rodar nada. Tú compórtate como un cámara profesional. Se supone que vais a rodar una escena donde cogeréis a un chico de la calle y lo pondréis a grabar con Lulú.
-          ¿Y quién es el chico que rodará con ella?
-          Roger, pero ella no lo sabe. Tú confía en mí que lo tengo todo planeado.


Mientras tanto, en el despacho de Samuel…
-          Ha sido un auténtico placer conocerle Roger. Tras esta entrevista y su currículum, pensaremos muy detenidamente contratarle aquí.
-          Ojalá sea así. Me encantaría.
-          Ah, una cosa más joven.
-          Sí, dígame.


Patrick estaba al tanto de los planes de Fernando y siempre que pudiera, echaría una mano a su buen amigo.
-          Tengo una entrada para el estreno de la película de esta semana. Si lo desea es suya.
-          Pero, ¿así sin más?
-          Claro, yo no puedo ir y me da pena tirarla. Tome, aquí tiene.
-          Muchísimas gracias. No sé qué decir.


Fernando desapareció de allí alegando que tenía una llamada urgente que atender. Así Roger no lo vería y no sospecharía nada. Unos minutos más tarde, Roger llegó al estudio y se dirigía hacia la puerta cuando Samuel lo paró.
-          ¡Oiga! Usted, el rubio. Venga un momento.


Roger se acercó a Samuel sin saber muy bien qué quería ese hombre.
-          Buenos días, mi nombre es Roberto y esta chica que está aquí es Lulú. Soy productor porno y tengo que rodar una escena con ella pero el actor nos ha fallado. ¿Le gustaría actuar para nosotros?
-          ¿Cómo?
-          A ver, el actor que tenía que rodar con nosotros se encuentra mal y no va a poder rodar así que hemos decidido cambiar el pasodoble y coger a alguien de la calle para que grabe con ella. ¿Qué me dice?
-          Bueno, a ver… ¿Y esto dónde saldría después?
-          Somos una productora porno finlandesa y nos estamos intentado abrir paso en este mundo, por eso hemos venido aquí, pero nuestro principal público es de Finlandia.


Tras unos segundos pensando, Roger miró a Lulú. Ese escote, esas piernas… No podía negar que follar con ese pivón iba a ser un lujo. Solo esperaba que Claire no se enterara.
-          Espero que diga la verdad. No me gustaría tener problemas con mi novia.
-          Ah, no se preocupe. Está a salvo.


Lulú miró a Roger y le guiñó un ojo haciendo que éste sonriera como un tonto.
-          ¿Te gusta, Lulú?
-          Sí, no está mal el chico. A ver qué sacamos de aquí.


Samuel los llevó a una parte exterior de los estudios donde empezaría la escena, simulando una calle.
-          Quedaos aquí un momento mientras voy a por el equipo. Empezad a poneros a tono si queréis y así luego la escena se graba más rápido.


Samuel fue hasta el lugar donde se escondía Fernando.
-          ¿Qué tal va la cosa?
-          Genial. Los acabo de dejar besándose en el banco. ¿Qué es lo siguiente?
-          Llama a Fernando y dile que tienes 2 entradas para el estreno de hoy. Que si quiere puede venirse con Claire.


¿Funcionará el plan de Fernando?

CONTINUARÁ…

jueves, 25 de febrero de 2016

Capítulo 6 de "Return"

¡Buenaaaaas! Otro jueves más que estoy aquí para dejaros un capítulo nuevo. La cosa cada vez se pone más tensa... ¡Hoy lo veréis!

CAPÍTULO 6

Fernando no tenía tiempo que perder, por lo que fue hasta el festival de verano. Sabía que allí se encontraría con Roger y éste le pediría disculpas.


Salió disparado de la máquina cayendo al suelo. Dolorido, se levantó y se fue.


Mientras tanto, Fernando intentaba separarse de la barandilla para poder patinar un poquito en la pista.


Roger pasaba por allí cuando vio que Fernando estaba patinando. Su novia le había regañado por pelearse el otro día, así que se sentía en la obligación de disculparse con él.


Aunque esa idea tampoco le gustaba. Tendría que tragarse su orgullo y pedirle disculpas a aquel individuo. No quería, pero era lo que tenía que hacer si quería que las cosas con su novia fueran bien.


Roger comenzó a avanzar cuando un agotado Fernando llegó al parque.
-          Oiga, ¡disculpe!


Roger giró su cabeza y vio a Fernando.
-          ¿Usted otra vez? ¿Qué le ocurre? No para de seguirme…
-          ¿Seguirle? No, no se confunda. Simplemente hemos coincidido en dos momentos.
-          Bueno, ¿qué quiere?
-          Verá… vi la paliza que le pegó aquel joven a usted.
-          ¿Paliza? Qué va, fue un par de puñetazos simplemente.
-          Quién lo diría cuando se fue cojeando del cine.


- La expresión de Roger cambió completamente.
-          El tío ese me pilló desprevenido, no pude hacer nada.
-          Ya veo ya… ¿Y qué va a hacer? ¿Saludarlo como si no hubiera pasado nada?
-          Bueno, yo… Mi novia discutió conmigo por pelearme y me dijo que debía disculparme cuando lo viera de nuevo.


Fernando estaba consiguiendo liar cada vez más a Roger.
-          Me parece increíble que su novia le dijera eso. Yo vi como pasaba todo y la culpa fue de él.
Usted lo único que hizo fue dejarle las cosas claras.
-          Exacto. Tal vez me pasé un poco cuando lo empujé y tal pero…
-          ¿Y él no se pasó con usted? Lo dejó cojo, por el amor de Dios.


Roger estaba en el bote.
-          Yo no sé usted, pero yo le dejaría las cosas claras a ese imbécil.
-          Sí… ¡Sí! Tiene razón. Voy a cantarle las 40 a ese gilipollas.


Mientras tanto, el Fernando más joven dejó de patinar y vio a Roger hablando con un hombre, sin saber que ese hombre era él mismo.
-          Oh, oh… Ese tío está ahí. Espero que no venga a por más pelea.


Roger finalmente fue hacia Fernando mientras que, el Fernando más mayor se iba de ahí con una amplia sonrisa en la boca. ¿Qué conseguía haciendo que Roger fuera a pegarle? Que cuando Claire saliera del baño y viera a su novio pegando a Fernando, se apiadaría de él y así haría que ambos se conocieran.


A todo esto, Roger se acercaba más y más a Fernando con cara de pocos amigos con un paso muy ligero.
-          ¡Tú gilipollas! Te vas a enterar de lo que es bueno.
-          Oh, oh… Se avecinan problemas.


Cuando Roger llegó al lugar donde se encontraba Fernando le propinó un puñetazo en la cara sin mediar más palabra. Fernando se revolvió y le comenzó a agarrar del cuello para intentar tirarlo al suelo y derribarlo.


Nuestro Fernando, veía la escena con atención desde lo lejos, junto al baño donde sabía que estaba Claire. Se acordaba perfectamente.
-          ¡Pelea! ¡Pelea!-gritó Fernando para que llegara a oídos de Claire-.


Claire salió del baño asustada y al ver que su novio se estaba peleando con un chico, supo que aquel era el de la vez anterior.


Unos minutos después, Roger pegó un fuerte puñetazo a Fernando en la boca, haciendo que le comenzara a sangrar abundantemente. Quedándose semiinconsciente, Roger acabó con él pegándole un puñetazo en el estómago que lo tumbó en el suelo.


Fernando estaba bastante mal. Tenía la nariz rota, muchas magulladuras y una herida profunda en el labio.


Roger al fin se había vengado de aquel “niñato” y estaba orgullosísimo de lo que había hecho.


Claire bajó las escaleras muy enfadada con Roger, que al verla, se quedó bastante serio. Sabía que había metido la pata…


Claire comenzó a gritar tan fuerte que las personas del piso 10 la escuchaban…
-          ¡¿SE PUEDE SABER QUÉ COÑO HACES?! QUE SEA LA ÚLTIMA VEZ QUE LE PEGAS A ALGUIEN, ¿QUEDA CLARO?
-          Cariño yo…
-          NI CARIÑO NI LECHES. 


Nuestro Fernando miraba la escena desde lejos con un gran nudo en el estómago.


Verse a sí mismo en aquella situación, sentir por un instante los golpes en su cuerpo… Una lágrima de dolor y tristeza rodó por su mejilla.


Fernando necesitaba airearse, respirar aire puro, por lo que se fue mientras que Claire se acercaba al herido Fernando para preocuparse por su estado.
-          ¡QUE TE PIRES! ESFÚMATE ROGER. Ey, chico, despierta…


Pasados quince minutos, Fernando comenzó a reaccionar y con la ayuda de Claire logró incorporarse un poco.
-          Ey buenas, soy Claire. ¿Cómo te encuentras?
-          Me duele mucho la cabeza… ¿Qué ha pasado?
-          Has sufrido una conmoción muy fuerte en la cabeza después de la pelea con Roger.
-          ¿Roger? ¿Conoces a ese tipo?


Claire comenzó a sonrojarse de la vergüenza. No sabía cómo decirle que ese chico era su novio.
-          Bueno, sí… Es… Mi novio.
-          Oh, cof, cof…-tosió Fernando escupiendo un poco de sangre-, lo siento mucho.
-          Venga, te ayudo a levantarte, vamos al hospital.


Fernando se levantó del suelo con la ayuda de Claire que se sentía culpable por todo lo que había causado Roger.
-          No sabes cuánto lo siento. Mi novio es muy impulsivo y un tipo muy orgulloso. Si pudiera hacer algo por ti…
-          No te preocupes. Ya has hecho suficiente ayudándome.
-          De verdad, me sentiría mejor si te ayudo.
-          A mí poco me vas a ayudar ya, pero ayúdate a ti misma y aléjate de ese hombre. Una persona que actúe así con otra… No dice mucho de él.


Claire estaba realmente sorprendida por las palabras de aquel muchacho. Nunca había pensado que si se lo había hecho a él, en cualquier momento podría hacérselo a ella…
-          Perdóname. No debí hablarte así. Es tu novio al fin y al cabo. Discúlpame… ¿Cómo era tu nombre?
-          Claire, ¿y el tuyo?
-          Fernando, encantado de conocerte, aunque sea en estas circunstancias.
-          Ojalá nos hubiéramos conocido en otro sitio y de otra forma y no así. Sigues sangrando mucho, deberías ir al hospital.


A Fernando le costaba mucho hablar por la herida de la boca y la hemorragia de la nariz había cortado un poco, aunque seguía sangrando.


Claire estaba empeñada en ayudar a Fernando así que a éste se le ocurrió una idea.
-          Está bien. Vayamos a mi casa, me doy una ducha, me cambio de ropa y vamos al hospital. Mi padre trabaja allí así que será rápido, ¿te parece bien?


Dicho y hecho. Vieron un taxi pasar por allí y lo cogieron para ir a casa de Fernando.
-          Bueno, ya hemos llegado. Esta es mi casa.


Fernando y Claire entraron y el anfitrión le invitó a Claire a sentarse en el salón.
-          Siéntate aquí mientras me ducho y me cambio, ¿vale?
-          Está bien.
-          No tardo, enseguida salgo.


Fernando estaba bastante magullado pero había conocido a Claire, que era el objetivo. ¿Surgiría una amistad después de esto?

CONTINUARÁ…